El gobierno cubano se comprometió con la Iglesia Católica a trasladar a los presos políticos a cárceles de sus provincias de origen para darles atención médica, informó el domingo el arzobispado de La Habana.
"La oficina de Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba le avisó a la Iglesia Católica el viernes que a partir de la próxima semana se iban a trasladar a los presos políticos a las cárceles de sus lugares de origen, para que los más enfermos sean atendidos en hospitales", dijo a AP Orlando Márquez, miembro del arzobispado de La Habana.
La iniciativa se registra después de que el presidente Raúl Castro se reuniera el miércoles con el cardenal Jaime Ortega y el arzobispo de Santiago y presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, monseñor Dionisio García, para hablar de la realidad cubana y temas como la situación de los presos políticos y de la disidencia.
Márquez confirmó que el obispo auxiliar de La Habana, Juan de Dios Hernández, visitó el sábado al disidente Guillermo Fariñas para informarle de la decisión. El Disidente se encuentra en huelga de hambre desde hace 89 días para exigir la liberación de los "26 presos políticos más enfermos".
En una entrevista el domingo a la AP, Fariñas afirmó que tras "la señal de buena voluntad" dada por las autoridades con el traslado de los presos políticos, "yo dejaría la huelga de hambre si (el gobierno) da un calendario a la Iglesia de la liberación de los otros presos paulatinamente".
Explicó que "ayer (sábado) a las 3.30 de la tarde me visitó el obispo auxiliar de La Habana, Juan de Dios Hernández, y me informó que el gobierno de la isla iba a empezar a relocalizar en sus provincias de residencia a algunos presos políticos, pero no me precisaron cuantos".
Fuente: AP
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